Este jueves se han hecho públicos los resultados de la segunda ronda del estudio COSMO-SPAIN, que coordina el ISCIII desde el Centro Nacional de Epidemiología (CNE) y que está impulsado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). El trabajo, que busca conocer los conocimientos y la percepción el riesgo de la población ante la pandemia de COVID-19, se está llevando a cabo en otros 31 países. Se espera que sus resultados ayuden a hacer frente a la epidemia aportando información relevante y actualizada a la hora de diseñar estrategias de salud y campañas de sensibilización. El estudio COSMO-SPAIN está coordinado por el Instituto de Salud Carlos III en colaboración con el Ministerio de Sanidad, la OMS, la Universidad de Murcia y la Universidad de Cádiz.
 

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La investigación, que comenzó antes de verano, presentó en julio sus resultados preliminares, y en agosto los resultados de la primera ronda. En esta segunda ronda (los resultados completos, con gráficas incluidas, pueden consultarse en este enlace) han participado 1.057 personas residentes en España, mayores de 18 años, con una distribución similar por sexos (49,6% hombres y 50,4% mujeres). La encuesta se realizó entre los días 22 y 25 de septiembre de 2020, durante lo que se ha denominado 'segunda oleada' de la pandemia de coronavirus/COVID-19.
 

Preocupaciones

La preocupación de la población respecto a la pandemia sigue siendo elevada: el 60% de las personas participantes indican 'mucha o muchísima' preocupación por la COVID-19. En todo caso, el nivel de preocupación ha disminuido respecto a la encuesta anterior, e incluso ha aumentado levemente el porcentaje de encuestados que dicen que el virus y la enfermedad les preocupa 'poco o nada'. Las principales preocupaciones se mantienen similares a la ronda anterior (posible saturación de servicios sanitarios, gente que no utiliza mascarilla, hipotéticos nuevos confinamientos), pero aumentan la preocupación por la situación económica y laboral: por ejemplo, a uno de cada dos encuestados le preocupa mucho poder perder su trabajo.

Además, situaciones que preocupaban menos a la población en la primera ronda del estudio (realizada entre el 27 de julio y el 3 de agosto), como la salud física y mental, salir a la calle o el cierre de centros educativos, han aumentado en esta segunda ronda.
 

Percepción del riesgo y contagio

En general, la percepción de la población sobre la evolución de la pandemia ha empeorado: un 47% de los encuestados cree que lo peor de la pandemia está por venir y un 31% que ahora (por finales de septiembre) se está viviendo lo peor. Sin embargo, la percepción sobre la gravedad que tendría la enfermedad en caso de contagiarse ha descendido: un 39% considera que sería ‘grave o muy grave’, frente a un 43% de la encuesta anterior, y sólo un 27% de la población cree que sus probabilidades de contagio son elevadas o muy elevadas.

Por otro lado, ha aumentado un 5% la población que percibe como 'difícil o muy difícil' evitar el contagio y la infección. En torno a un 75% de los participantes considera que existe una alta probabilidad de contagio en sitios concurridos en espacios cerrados; la percepción del riesgo se reduce cuando el sitio, a pesar de ser concurrido, es un espacio abierto (52%). Utilizar el transporte público, reunirse con familiares o amigos en casa o acudir a un centro sanitario siguen siendo situaciones en las que la precepción del riesgo de contagiarse es alta. Además, el 48% de la población cree que es probable contagiarse en los centros educativos y el 45% al trabajar presencialmente.

Conocimientos, cuarentenas y alfabetización en salud

Por lo general, el conocimiento sobre las formas de contagio es adecuado y se mantiene alto. Sobre el uso de la mascarilla, el conocimiento ha ido mejorando a lo largo del tiempo, pero sigue habiendo un 9% que cree que hay que quitarse la mascarilla para toser o estornudar. Por otro lado, el 95% de la población sabe que si tiene síntomas debe quedarse en casa. A las preguntas sobre qué harían en caso de ser contacto estrecho de un positivo, el 74% llamaría inmediatamente al centro de salud o al teléfono de información para seguir sus indicaciones, y el 54% se aislaría inmediatamente. Sin embargo, un 17% se aislaría en casa pero no de su familia, y un 12% dice que haría vida normal. Un 3% de la población admite que no sabe lo que debería hacer.

Las personas encuestadas consideran que es sencillo encontrar, comprender y aplicar la información relativa al coronavirus/COVID19. Un 78% de los encuestados refiere que le es fácil o muy fácil encontrar información que necesita, y más del 80% afirma que le es fácil o muy fácil entender y seguir las recomendaciones. La dificultad percibida aumenta al valorar cuándo hay que ir al médico por un problema sin relación con el coronavirus/COVID-19, y al evaluar si la información que dan los medios de comunicación sobre el coronavirus/COVID-19 es fiable.

Comportamiento

La adherencia a las medidas preventivas recomendadas por las autoridades sanitarias sigue siendo alta. Durante la semana previa a la encuesta, las medidas de prevención que la población dice haber realizado 'siempre' siguen siendo por este orden: usar mascarillas (90%), lavarse las manos y/o usar gel hidroalcohólico (85%), ventilar los espacios cerrados (84%) y guardar distancia física (80%). El 72% considera que evitar el transporte público es una medida preventiva, y el 68% dice haber evitado las reuniones sociales y familiares. Fuentes de información Algo más del 40% de la población busca información sobre el virus y la enfermedad entre 4 y 5 veces al día. Las fuentes de información consultadas han variado poco: telediarios, internet y prensa siguen siendo las fuentes de información más consultadas, mientras que la información procedente de los profesionales sanitarios, la OMS y el Ministerio de Sanidad continúan siendo las que más confianza generan. Una vez más, las redes sociales se consultan bastante, aunque se confía poco en ellas; lo mismo ocurre con los programas de debate de radio y televisión. En este sentido, preguntadas sobre la confianza que les generan distintas instituciones, las personas encuestadas confían más en los científicos (69%), hospitales (58%) y centros de salud (54%).

Decisiones

En consonancia con la ronda anterior, las medidas adoptadas durante la pandemia que mayor acuerdo generan son el uso obligatorio de mascarilla (80% de acuerdo) y las restricciones de aforo y horario en bares, restaurantes y locales de ocio: únicamente un 10% de la población dice estar en desacuerdo con las restricciones de aforo en bares y restaurantes, mientras que un 14% no está de acuerdo con esta medida. El 42% de los encuestados está de acuerdo con la apertura de los centros educativos. Mantener la libertad de movimientos entre provincias se consideraba una buena medida para el 40%, pero el movimiento libre entre países genera más desacuerdo. Al preguntar sobre las medidas que se deberían tomar en un segundo brote generalizado de COVID-19, la medida con más aceptación sería 'unificar la normativa y las restricciones a nivel nacional', con un 63% de la población totalmente de acuerdo, seguida de 'confinar las zonas más afectadas' (62%). La población que estaría de acuerdo en volver a proclamar el Estado de Alarma aumenta hasta casi llegar al 50%, mientras que un 43% estaría de acuerdo en confinar de nuevo a toda la población si llegara este segundo brote generalizado.
 

Vacunación

En la ronda 1, realizada a finales de julio, el 70% de los encuestados decía estar de acuerdo en vacunarse de forma inmediata si ya hubiera una vacuna disponible y estuviera indicada por las autoridades. En esta segunda ronda el porcentaje desciende y se sitúa en un 43%. Entre las razones que las personas encuestadas arguyen son 'riesgos para la salud' (59%) y 'creo que no será eficaz' (16%).
 

App de rastreo

Con respecto al uso de una aplicación gratuita de rastreo para el teléfono móvil, que le advirtiera si puede haber sido infectado con el coronavirus/COVID19, el porcentaje de la población que dice que se la descargaría se mantiene en más del 55%.

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